Casi Mejor

Hoy estoy mejor. 

No un poco, sino harto. 
Puedo decir que me siento feliz, 
agradecida, de estar viva, 
de estar escribiendo aquí. 

Agradecida por el futuro, 
que con dulzura parece sonreír. 
Me lo imagino como un camino alargado, 
lleno de álamos a los lados,  
con un color naranjo otoñal, 
y con una brisa tibia-helada, 
pero voy bien abrigada. 

He decidido dejar de buscar tantas respuestas, 
para preguntas que simplemente no las tendrán. 
¿Qué es lo que realmente puedo controlar?
Mi presente y mi futuro. 
Pero ya nunca mi pasado. 
Ese ya quedó atrás, 
no se puede modificar, 
solo observar, 
para aprender de él y avanzar. 

Agradezco el camino recorrido, 
entiendo el por qué de los desvíos, 
también por eso ya no pregunto tanto, 
entiendo que las respuestas, 
llegarán el algún momento, 
cuando esté mejor preparada, 
cuando tengan que hacer sentido, 
no cuando hagan solo ruido. 

Agradezco a mi entorno, 
a mi gente, a mis amigos, 
a la Deborah y a la Vero, 
a la Vivi y a José Miguel, 
no estaría así sin su cariño, 
sin su guía, ni su tino. 

Cuando pienso en Alejandro, 
ya no siento ese gran vacío, 
ya no siento el pecho oprimido, 
pero si siento una incomodidad, 
esa sensación extraña, poco familiar, 
de que algo aún no cuaja. 
De que sigue faltándome algo,  
una despedida, una explicación, 
pero ahora soy capaz de ubicar ese "algo", 
en un nuevo cajón. 

Y ahí quedará por otro rato, 
no me siento lista para desmenuzarlo tanto, 
aún le tengo un poco de temor, 
de que me desarme, cuando me siento tanto mejor. 
Todavía falta tiempo al tiempo, 
como dicen en alguna canción. 

Todavía falta un poco, 
pero ahora, 
solo un poco,
para estar,
casi mejor.